Conociendo el valle

De paseo por Constanza...

A unas pocas horas de Santo Domingo se encuentra el pueblo de Constanza, en la provincia de La Vega. Un hermoso valle con un clima delicioso y un paisaje que te deja sin habla. Es conocida por ser la ciudad más fría de la República Dominicana y de todo el Caribe. Su clima se caracteriza por mantener temperaturas frescas y lluvias durante todo el año.

Hemos salido de Santo Domingo un viernes en la tarde y tomamos la Autopista Duarte que conduce al interior del pais. El viaje toma de dos horas y media a tres, dependiendo de donde te vayas a hospedar.  La primera parte del trayecto transcurre muy normal hasta que empezamos a subir las montañas, después de pasar por la provincia de Bonao. En esta parte la carretera tiene muchas curvas, sin embargo esta en perfecto estado, es una sola carretera doble vía y poco a poco empezamos el ascenso. Se empieza a sentir el cambio de clima y las nubes estan cada vez mas cerca!! Puede resultar un poco tedioso si eres una persona que tiende a marearse en este tipo de carreteras, de lo contrario puedes disfrutarlo por completo.

En esta parte del camino hay un parador turistico donde puedes empezar a apreciar del paisaje de montaña, respirar aire fresco y porsupuesto estirar las piernas....

Ya estas a pocos minutos de llegar a tu destino, empezamos el descenso hasta el hermoso valle de Constanza, tierra que se caracteriza por sus cultivos de hortalizas, flores, papas, fresas y otros cultivos propios de este clima.

Nuestra morada es una hermosa cabaña ubicada en una colina, rodeada de altos arboles y con una vista envidiable... acogedora y cálida. Hemos rentado esta cabaña online para hospedar a todo el grupo que viajamos. En total fuimos 6 adultos y tres niños que se divirtieron de principio a fin.

Luego de una noche de descanso, al dia siguiente nos levantamos a disfrutar de la vista y del clima porsupuesto, muy fresco en esta época del año. Por los alrededores se encuentran plantas frutales como melocotón, pimentón, también unos eucaliptos, y como olvidar a la pareja que nos acompañó durante nuestra estadía... un gallo y una gallina que se paseaban de lado a lado y que fueron la diversión de los mas pequeños. Nos llevaron fresas y flores de la zona para acompañar nuestro desayuno.

Una vez con las pilas puestas decidimos indagar por atracciones turísticas de la zona y encontramos el Salto de Aguas Blancas, situado a una hora desde donde nos encontrabamos. Este lugar es ideal para disfrutar el aire fresco de montaña y la exuberante vegetación.

Letrero que indica el camino al Salto de Aguas Blancas

Ademas de la caida de agua de unos 83 m, en este lugar se registran las mas bajas temperaturas de Las Antillas, hasta 8 grados bajo cero. Si te sientes valiente puedes disfrutar de un helado baño en la base de la cascada, aunque advierten riesgos de hipotermia, nos encontramos a varios valientes que disfrutaron de las gélidas aguas en compañía de su familia. Yo no me creí capaz de meterme mas sin embargo si estuvimos con nuestros pies en el agua por un corto tiempo y debo decir que estaba heladísimaaaaaa....

Este lugar esta bastante escondido, se llega por un camino sin pavimento pero seguro, y una vez allí piensas: Valió la pena!  El único punto negativo es que es un lugar sin establecimientos comerciales, es decir, no pagas entrada, pero no encuentras agua ni comida a la venta, así que toca irse preparado y con el estomago lleno. 

En este valle existen otros lugares pero por falta de tiempo no pudimos visitarlos, tales como Las Piramides y Las Piedras Letreadas, monumentos antiguos y de curioso aspecto que encantan al turista.

En nuestro ultimo dia en este maravilloso lugar, logramos descender hasta una pequeña colina para disfrutar por ultima vez del aire fresco y porsupuesto...tomarnos unas cuantas fotos....

Debo decir que es un lugar totalmente maravilloso, ideal para desconectarse del ruido y la contaminación de la ciudad, un espacio para reconectar con nuestro yo interior, apreciar la simpleza de la vida, y dar gracias al Creador por tan bellas maravillas y la bendición de disfrutarlas con quienes amamos...